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San Javier: condena y prisión para un ladrón reincidente

La investigación comenzó con el fiscal Francisco Cecchini, quien dispuso su detención a finales de noviembre de 2024

San Javier: condena y prisión para un ladrón reincidente

La investigación comenzó con el fiscal Francisco Cecchini, quien dispuso su detención a finales de noviembre de 2024

Impusieron un año y ocho meses de prisión a Williams Alberto Roble, quien reconoció haber cometido un hurto, tres robos y una violación de domicilio, todos durante octubre y noviembre de 2024.

 

Un sanjavierino con un extenso prontuario fue condenado por segunda vez, y declarado reincidente, tras haber cometido una serie de delitos -casi todos contra la propiedad- entre octubre y noviembre del año pasado

Se trata de Williams Alberto Roble, de 29 años, quien decidió firmar un acuerdo de juicio abreviado en el que reconoció haber cometido un «hurto», tres «robos» y una «violación de domicilio».

La investigación comenzó con el fiscal Francisco Cecchini, quien dispuso su detención a finales de noviembre de 2024. Luego, la causa pasó al fiscal Guillermo Persello, quien arribó al acuerdo de abreviar el proceso judicial junto a la defensora pública Magali Mazza.

El escrito fue presentado ante el juez Lisandro Aguirre, quien lo homologó y condenó a Roble a un año y ocho meses de prisión de ejecución efectiva, y lo declaró reincidente.

«Tengo un fierro, no quiero lastimarte»
El primer delito que Roble reconoció haber cometido en marco del juicio abreviado data de la noche del 19 de octubre del pasado año. Habían pasado las 21.45 cuando el ladrón sustrajo una garrafa de diez kilos, color lila, de la puerta de ingreso del local comercial «Don Cacho», ubicado en calle Moreno al 650 de la ciudad de San Javier.

Cinco días más tarde, a las 19.30, Roble interceptó a una ciclista y la empujó, haciéndola caer al suelo. Tras forcejear con ella, le quitó un teléfono celular Samsung A12 de color negro. Esto ocurrió en la vía pública, frente al ingreso del Club Atlético Central de la ciudad costera.

Roble cometió el tercer delito el 21 de noviembre por la tarde, en el local comercial «Quiniela Santa Rita», de calle Independencia al 2400. El hoy condenado ingresó al lugar e intimidó a la empleada, advirtiéndole: «Tengo un fierro, no quiero lastimarte». Mediante ademanes con los que simulaba portar un arma, la obligó a entregarle el dinero de la caja, unos $31.000.

Antes de darse a la fuga, Roble se subió a una banqueta y arrancó una cámara de seguridad ubicada en una de las paredes del local.

«Están robados»
Los últimos días de noviembre de 2024, Roble protagonizó un raid delictivo que lo llevó a terminar tras las rejas.

El 27 por la noche, aproximadamente a las 21.40, ingresó al local comercial «JM Bike» de calle Alvear al 2500 y amenazó a las dos personas que se encontraban allí, diciéndoles: «Ya están robados. Te hago corta. Dame la plata o se pudre todo. Si llamás a la policía te quemo el negocio». Mientras hablaba, les exhibía un elemento similar a la culata de un arma de fuego.

Del lugar se fue con un teléfono celular Samsung A33 negro, un reloj de pulsera marca Xiaomi, cientos de miles de pesos en efectivo y una bicicleta tipo mountain bike marca Fire Bird gris.

Al día siguiente, entre las 13:20 y las 17, Roble ingresó sin autorización a una vivienda ubicada en las calles Independencia y San Roque, en el barrio San Antonio. Se quedó en el domicilio hasta las 19:30, momento en que fue aprehendido por personal policial.

Identificado como el autor de varios delitos, quedó detenido y fue imputado. Permaneció en prisión preventiva hasta el pasado jueves, cuando fue condenado.

Fuente: diario El Litoral

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